La prensa dijo ...

SOMBRILLAS PARA UNA LADY.

… Un humor nuevo y absurdo que campea a lo largo de un “show” que parece volvernos a los primeros y felicísimos momentos de “La Codorniz”, cuando dirigía Mihura,o, más cerca todavía al absurdo Beckett—Ionesco (sobre todo del segundo), sobretodo por el diálogo llevado a su último extremo. Terribles ironías, frases de doble sentido salpicadas de sarcasmo... A veces no tiene ni pies ni cabeza, pero qué falta le hacen a este ”musical” que tan graciosamente ha decorado el propio autor y director para su función de la que dudo mucho esperase un análisis profundo?. Mas que un miniballet, cutro “gogó-girls”, que incluso instalan el decorado y que, sobre todo hacen un número de positiva novedad: el “strip-tease” al revés. “Play-backs” de músicas conocidas con textos originales y para remate un pasodoble desmitificador, entre otras cosas de nuestro tan apreciado (por los extranjeros) sol español..

...Sorprende, inevitablemente, que un actor de la talla de Carlos Ballesteros, haya puesto su humor al servicio del esparcimiento de un público sin problemas, con un esbozo de argumento entramado con gracia inteligente
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